Autor: Juan Carlos Torres
Editorial: Planeta
ISBN: 978-84-08-08876-9
Páginas: 288
Precio: 18 €
Si los protagonistas de esta historia se apellidasen Helms, Dulles, Angletone o Hayes estaríamos seguros de que ya se estaría preparando en Hollywood una película, pero como se apellidan Pérez, Padilla, Arteaga o Santos, es dudoso de que los productores de cine se interesen por ella, aunque quién sabe.
En julio de 2008, el mundo quedó conmocionado por la noticia de que en una increíble operación el Ejército colombiano había rescatado a Ingrid Betancourt y otros rehenes de manos de los terroristas de las FARC. El asombro creció a medida que se conocieron más detalles de la operación: no se produjo ningún disparo, no hubo ningún muerto ni herido y fue una operación de inteligencia perfecta. Un año después, ha llegado a España el libro que narra la Operación Jaque, escrito por Juan Carlos Torres.
El rescate de la política Ingrid Betancourt, de once militares y policías y de tres norteamericanos, junto con el apresamiento de dos jefes guerrilleros sin una sola baja confirma que las Fuerzas Armadas colombianas son las mejores del Caribe, porque son capaces de desarrollar operaciones de inteligencia durante meses y ejecutarlas sin equivocaciones.
Una de las prácticas terroristas más frecuentes de las FARC y el ELN consiste en el secuestro durante años de militares, policías y políticos colombianos, a los que mantienen en la selva para presionar al Gobierno con intercambio de prisioneros o negociaciones. Ingrid Betancourt, por ejemplo, fue secuestrada en febrero de 2002, a los tres días de que el presidente Andrés Pastrana rompiese las negociaciones con las FARC en las que había cedido a esta banda guerrillera un territorio libre de autoridades y funcionarios de la extensión de Extremadura.
Las FARC valoran tanto sus rehenes y el hecho de mantenerlos presos que han llegado a asesinar a algunos de ellos antes que permitir que el Ejército los rescate. La matanza de diez secuestrados en mayo de 2003 hizo que el presidente Álvaro Uribe ordenase al Ejército que se suspendiesen los rescates violentos y a cambio comenzase una labor de inteligencia más lenta y callada, pero quizás la única manera de conseguir la liberación de estas víctimas del terrorismo.
Operación Jaque no tiene equivalente en la historia de los servicios secretos. No se trata de unidad armada que irrumpe bajo un disfraz en una zona enemiga y cumple su objetivo con la amenaza de sus pistolas y fusiles: el grupo estaba indefenso y su seguridad dependía de su disfraz. Los profesionales de inteligencia colombianos –adiestrados por británicos, israelíes y norteamericanos- levantaron un trampantojo, entraron en contacto con el jefe de la tropa que tenía secuestrada a Betancourt y sus compañeros como si fuesen la dirección de las FARC y, a lo largo de quince meses, persuadieron al terrorista de que se dirigiera a un área determinada para entregar los rehenes a unos observadores internacionales.
En este relato los momentos más impresionantes son aquellos en los que los militares, sabiendo que podrían ser asesinados o convertirse en rehenes, se ofrecen para participar en el rescate, y sin tener el consuelo de ver su cara en periódicos y televisiones.
El libro está escrito en un estilo ágil y rápido, con la acción dividida en pequeños capítulos. Aparte del realismo, ‘Operación Jaque’ contiene verismo: el autor habló con prácticamente todos los protagonistas.
Todavía hay héroes, y encima hablan español y piden el amparo a Cristo antes de poner su vida en riesgo.
0 Response to "Operación Jaque"